Y así es... hoy, después de casi 4 meses sin correr a causa de un incidente con el coche... he vuelto a ello... sí sí... he ido poco a poco, lo prometo... llevo tiempo andando, alternando correr y andar (como mandan los entrenamientos de novato)... y sé que aún no debería haber hecho lo que he hecho hoy... pero no he podido evitarlo... Me he puesto... y 50 minutos después, he parado... a ritmo constante, muy relajado, y controlando que los impactos no me hicieran daño y me hagan recaer en otro parón deportivo...
y hoy, hoy ... soy uno de los seres más felices de la tierra...
eso si, mañana... voy a tener agujetas...¡¡ hasta en las pestañas!!!
Y es que a pesar de todo, nada nos espera. Tan sólo la parte perdida de nosotros mismos, de nuestra esencia. Esto es tan sólo la sombra de mi inerte emoción tras tus huellas... ... y mis pasos se pierden en la bruma de mis pensamientos... del sinsentido de la vida que siempre termina en nada...
Al principio me parecía que seis meses eran una eternidad... y ahora, veo que el tiempo cada vez es más corto... Hace algo más de seis meses de mi última entrada, contando que me iba a Hamburgo... a cambiar de aires y a ver qué había por allí... yo, como siempre, actuando a impulsos irracionales. Pensaba antes de irme, que quizás era demasiado tiempo. Que volvería antes. La realidad ha sido otra.
Lo cierto es que me llevaba ideas en el bolso. Pero las ideas, las puedes dejar en cualquier aeropuerto... o en cualquier parada de metro... o en cualquier esquina. Una vez en Hamburgo, mis pasos me han llevado a cosas buenas, a cosas muy buenas, pero también a algunas... que no estoy dispuesta a recordar. La ciudad me ha mostrado muchas caras, y no todas amables. Pero sí me ha dejado conocer a gente, que ha hecho que me costara volver a casa. Gente a la que llevo allá dónde voy. Que me hacen pensar que lo malo, a veces, tiene una cara que sonríe. Una cara humana. La vuestra.
Ahora, después de estar unos días por casa de nuevo, pienso en esos meses allí, y lo mejor que recuerdo, sois vosotros.
Lo queráis o no, habéis entrado en mi pequeño rincón de mi mundo.
A veces, uno tiene que dar pasos fáciles... otras veces, los pasos cuestan más... otras simplemente sigues el camino... otras vas tropezando un poco... y eso es lo que yo suelo hacer normalmente... Voy dando pasos o tropezones hasta donde llegue. Hasta ahora mal del todo no me ha ido, para que engañarnos, pero siempre se puede mejorar. Y eso es lo que trato de hacer. La cuestión es que ahora el camino me lleva lejos una temporada. Lejos de mi familia y lejos de mis amigos. Lejos de mi casa y de todo lo que hasta ahora hace que esté cómoda... En pocas horas pisaré tierra alemana. Hace no mucho tomé la decisión de aceptar una oferta - beca para trabajar allí durante 6 meses... y es que 6 meses no son nada. Eso si, tengo claro que frío voy a pasar... Sí claro, siempre hay opciones, como quedarse aqui engrosando las ya de por sí llamativas cifras de paro en España. Porque claro, me he quedado sin trabajo justo en agosto... sí, ese agosto que ha dado más de 100.000 parados en España, que se han unido, a los parados que ya lo estaban en julio... Pero la cuestión es que el hecho de estar parada no ha sido lo que me ha decidido a irme... si no, yo misma... y la necesidad de darme un rumbo nuevo. Supongo que en ocasiones es difícil, pero muy importante para uno hacer estas cosas... tener estas aventuras... arriesgarse un poco. En fin, que me he liado la manta a la cabeza y marcho a Hamburgo a trabajar y por supuesto a seguir adelante. A aprender. A disfrutar. El resto, ya os lo iré contando ;)
Es sin duda alguna, la imagen de estos juegos olímpicos. El jamaicano Usain Bolt se va con dos oros y dos records mundiales. Formidable. Qué forma de correr, qué forma de volar sobre la pista... Enhorabuena.